miércoles, 28 de noviembre de 2007

LA IGUANA NEGRA AL BORDE DE LA EXTINCION

Por: Giovani Galguera Díaz

La iguana negra, ha servido como alimento para los habitantes de las comunidades y zonas rurales de la región. Sin embargo, durante las ultimas dos décadas, la excesiva explotación de este animal a ocasionado que se encuentre en peligro de extinción. La mayoría de los cazadores ya no utilizan a la iguana como un alimento alternativo en su dieta, sino que la comercialización de esta les atrae en mayor grado para obtener dinero. En un día de cacería, se pueden capturar alrededor de 10 a 20 iguanas, sino es que más, las cuales van a parar convertidas en tamales o en guisados típicos de la región a los mercados de las poblaciones con mayor índice de consumidores como es el caso de Pochutla. De esta manera, cada año en los meses de febrero y marzo, las iguanas entran en su ciclo de reproducción lo cuál es mucho más fuerte la demanda del producto, pues las iguanas con huevo tienen mucho más valor que un macho (garrobo). Sabemos también que el platillo de este animal es típico de la región y el cual se come con gran orgullo por ser una comida tradicional de Pochutla y de toda la costa principalmente. Sin embargo, también debe existir en parte conciencia por preservar la fauna de nuestro entorno. Si bien el problema de la caza de la iguana negra tarde en erradicarse o quizás nunca llegue a suceder, si es viable realizar un adecuado programa de conservación y preservación de esta especie. Lo más conveniente seria realizar un proyecto en el cual se desarrolle la opción de construir criaderos de iguana negra con el objetivo de no dejar que la población de estos animales decrezca. De esta forma, estos proyectos servirían de ayuda para ir generando conciencia de que en realidad la fauna de nuestro entorno ha estado desapareciendo. Si bien aún podemos observar a estos animales en su hábitat natural, al ritmo en el que se caza probablemente en un lapso de 20 a 30 años ya no existirán.
Cuentan que en la región hace más de 40 años se podía apreciar como corrían los venados en las orillas de Pochutla, como por ejemplo en el cerro del vigía y mucho más cerca a la altura de la gasolinera RUSVI. Estos y muchos más ejemplos son muestra del cambio radical que nuestra población sufrió al pasar de una zona prácticamente rural a una zona urbanizada. Sin embargo, ese cambio fue desmedido pues hasta hoy en día hemos sido testigos como se dio el crecimiento de nuestro entorno sin tomar en cuenta al medio ambiente. En países como Costa Rica y Panamá, la gente ha conocido el desarrollo sin tener que perjudicar drásticamente el medio ambiente.
Finalmente para buscar las soluciones al problema planteado, seria conveniente recurrir a instancias internacionales. Existen organizaciones extranjeras y nacionales en materia de conservación de especies, por lo que ante la situación que se vive en nuestra región, se tiene la seguridad que trabajando en coordinación con estas organizaciones, los gobiernos y la sociedad civil se podrá hacer algo.

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