Por: Patricia Pacheco Guzmán 
Pochutla, Oax.- José Manuel Ricardez López, presidente municipal de San Pedro Pochutla, exigió que se castigue a los elementos de la policía preventiva que dispararon a siete jóvenes que viajaban en una camioneta la noche de ayer, dejando como saldo dos muertos y tres heridos.
Visiblemente consternado, demandó que se aplique “todo el peso de la ley” a los culpables de los asesinatos, pues dijo “actuaron con premeditación, alevosía y ventaja” contra el grupo de jóvenes que regresaban a sus domicilios después de estar en la feria del pueblo, sin que hubiera un motivo de por medio.
“La forma tan artera en la que se suscitaron los hechos me hace pensar que los policías no venían en sus cinco sentidos, a lo mejor
venían borrachos, drogados o locos”.
Detalló que los dos jóvenes que resultaron ilesos y que fueron testigos de los hechos, refieren que en ningún momento los elementos que viajaban en las patrullas número 1110 y 948, les hicieron señalamientos de que se detuvieran, por lo que resulta todavía más evidente que actuaron de forma dolosa.
El edil explicó que apenas unas horas antes de la balacera, Pedro Ramos González, Delegado Regional de Seguridad Pública, le solicitó su
cooperación para reforzar los patrullajes y vigilancia en el municipio, y en el momento del incidente el propio delegado se encontraba al mando de los 10 elementos que protagonizaron la agresión, por lo que cuando le llamé “él mismo reconoció su culpabilidad porque venía al mando de estos policías”.
Ramos González también le confirmó que ya había cinco detenidos como presuntos responsables de los asesinatos, quienes se encuentran en la comandancia de la policía preventiva en Puerto Escondido.
“Yo lo que pido es que Sergio
Segreste, quien hasta el momento no me ha querido contestar el teléfono, se haga responsable de detener a los 11 asesinos, incluyendo a Pedro Ramos, y que ellos sean puestos a disposición del fuero común aquí en Pochutla por haber sido el lugar en el que ocurrieron los hechos”.
Por su parte, el Subprocurador de la costa, Víctor Alonso Altamirano, confirmó que los hechos sucedieron a la 23: 30 horas de la noche del sábado en el libramiento de esta localidad, y después de una primera inspección a la camioneta Chevrolet, tipo Colorado, de parte de elementos de la policía ministerial adscrita a este municipio, se comprobó que fueron 13 los disparos que los policías lanzaron al grupo de jóvenes.
Asimismo, señaló que se realizarán diversos dictámenes periciales a la camioneta y en el lugar de los hechos para deslindar responsabilidades. Además, se efectuarán pruebas toxicológicas tanto a policías como a los jóvenes, y a éstos últimos se les aplicará la prueba de rodizonato de sodio para saber si accionaron algún tipo de arma.
Reafirmó que los hoy occisos llevaban en vida los nombres de Marco Antonio López Jacinto y José Luis Castillo Pérez, ambos de 19 años de edad. Mientras que los heridos son Tomás de Jesús Delgado Velásquez, Gerardo Salinas Vizarretea y Argeo Ricardez Gutiérrez (sobrino de José Manuel Ricardez), todos ellos de 18 años.
Dos jóvenes más resultaron ilesos: Carlos Sánchez Aragón y Juan Luis Hernández Bohórquez, de 18 y 19 años respectivamente.
Los heridos son atendidos en el Hospital Regional de San Pedro Pochutla, y según el parte médico proporcionado por el doctor Juan Manuel Galán Morga, director del nosocomio, sólo Argeo Ricardez Gutiérrez se encuentra en un estado grave, al presentar perforación de pulmón y diafragma, así como un balazo en el estómago. Mientras que los otros dos jóvenes presentan heridas leves.
Pochutla, Oax.- José Manuel Ricardez López, presidente municipal de San Pedro Pochutla, exigió que se castigue a los elementos de la policía preventiva que dispararon a siete jóvenes que viajaban en una camioneta la noche de ayer, dejando como saldo dos muertos y tres heridos.
Visiblemente consternado, demandó que se aplique “todo el peso de la ley” a los culpables de los asesinatos, pues dijo “actuaron con premeditación, alevosía y ventaja” contra el grupo de jóvenes que regresaban a sus domicilios después de estar en la feria del pueblo, sin que hubiera un motivo de por medio.
“La forma tan artera en la que se suscitaron los hechos me hace pensar que los policías no venían en sus cinco sentidos, a lo mejor
venían borrachos, drogados o locos”.Detalló que los dos jóvenes que resultaron ilesos y que fueron testigos de los hechos, refieren que en ningún momento los elementos que viajaban en las patrullas número 1110 y 948, les hicieron señalamientos de que se detuvieran, por lo que resulta todavía más evidente que actuaron de forma dolosa.
El edil explicó que apenas unas horas antes de la balacera, Pedro Ramos González, Delegado Regional de Seguridad Pública, le solicitó su
cooperación para reforzar los patrullajes y vigilancia en el municipio, y en el momento del incidente el propio delegado se encontraba al mando de los 10 elementos que protagonizaron la agresión, por lo que cuando le llamé “él mismo reconoció su culpabilidad porque venía al mando de estos policías”.Ramos González también le confirmó que ya había cinco detenidos como presuntos responsables de los asesinatos, quienes se encuentran en la comandancia de la policía preventiva en Puerto Escondido.
“Yo lo que pido es que Sergio
Segreste, quien hasta el momento no me ha querido contestar el teléfono, se haga responsable de detener a los 11 asesinos, incluyendo a Pedro Ramos, y que ellos sean puestos a disposición del fuero común aquí en Pochutla por haber sido el lugar en el que ocurrieron los hechos”.Por su parte, el Subprocurador de la costa, Víctor Alonso Altamirano, confirmó que los hechos sucedieron a la 23: 30 horas de la noche del sábado en el libramiento de esta localidad, y después de una primera inspección a la camioneta Chevrolet, tipo Colorado, de parte de elementos de la policía ministerial adscrita a este municipio, se comprobó que fueron 13 los disparos que los policías lanzaron al grupo de jóvenes.
Asimismo, señaló que se realizarán diversos dictámenes periciales a la camioneta y en el lugar de los hechos para deslindar responsabilidades. Además, se efectuarán pruebas toxicológicas tanto a policías como a los jóvenes, y a éstos últimos se les aplicará la prueba de rodizonato de sodio para saber si accionaron algún tipo de arma.
Reafirmó que los hoy occisos llevaban en vida los nombres de Marco Antonio López Jacinto y José Luis Castillo Pérez, ambos de 19 años de edad. Mientras que los heridos son Tomás de Jesús Delgado Velásquez, Gerardo Salinas Vizarretea y Argeo Ricardez Gutiérrez (sobrino de José Manuel Ricardez), todos ellos de 18 años.
Dos jóvenes más resultaron ilesos: Carlos Sánchez Aragón y Juan Luis Hernández Bohórquez, de 18 y 19 años respectivamente.
Los heridos son atendidos en el Hospital Regional de San Pedro Pochutla, y según el parte médico proporcionado por el doctor Juan Manuel Galán Morga, director del nosocomio, sólo Argeo Ricardez Gutiérrez se encuentra en un estado grave, al presentar perforación de pulmón y diafragma, así como un balazo en el estómago. Mientras que los otros dos jóvenes presentan heridas leves.
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